Michael Newton ha sido una persona que ha trabajado profundamente el tema de las regresiones hipnóticas, centrándose en el periodo entre vidas, creando un instituto dedicado al tema.
Aquí como referencia se incluye un enlace al primero de cinco vídeos de una entrevista que se le realizó y que conlleva subtítulos en castellano.
Una entrevista más antigua y completa en inglés se puede ver en el siguiente enlace .
En el siguiente blog se puede escuchar en forma de audio libro su publicación titulada Vida entre Vidas
En el apartado de vídeos se puede escuchar su audiolibro Journey of Souls en inglés.
Algunos de sus libros se pueden encontrar en la red, sin embargo, queremos destacar de su último libro dedicado a los profesionales «Life Between Lives: Hypnotherapy for Spiritual Regression» a continuación se exponen sus conclusiones y leyes espirituales.
«Muchas personas salen de mi consulta llevando sus cintas grabadas como si fueran de oro y me pregunto, ¿cómo van a aplicar lo que han aprendido para dar a sus vidas una nueva dirección?.
Siempre siento que podría haber buscado más información, ayudarlos de mejores maneras y haber hecho más para brindarles una mayor conciencia de todas las maravillas de su vida espiritual.
Cada sesión es única y cada vez que puedo ayudar a una persona a desbloquear su conocimiento oculto sobre una existencia inmortal, me siento privilegiado.
Cuando comencé hace tantos años, tuve que abrir nuevos caminos sobre el uso de la hipnosis para alcanzar nuestra vida entre vidas, que tu no tendrás que hacer.
Al mismo tiempo, sé que los futuros practicantes de regresiones espirituales llevarán este trabajo mucho más allá de lo que lo he hecho yo.
La hipnoterapia LBL (Vida entre Vidas) conlleva una gran responsabilidad de dar lo más que puedas de tí porque las sensibilidades de cada cliente son muy complejas.
Al descubrir su inmortalidad, las personas que experimentan LBL ven una vida ininterrumpida de sucesiones de su existencia.
Esto les da una comprensión de su lugar en la continuidad de la vida, la muerte y el renacimiento.
A pesar de sus circunstancias actuales, las personas abandonarán tu consulta sabiendo que tienen un hogar permanente en la otra vida: un lugar de amor, paz y perdón, con seres altamente avanzados que se preocupan por ellos.
Tendrás personas que preguntarán que ahora que han obtenido toda esta información sobre sí mismos, ¿qué van a hacer con ella?
Están preocupados por cumplir con los elevados objetivos que los trajeron a esta vida. En mi caso trato de asegurarles que nuestros maestros tienen paciencia infinita con nosotros.
Le digo a la persona que se marcha, que no nos miden tanto por lo que hacemos por nosotros mismos, sino por cómo hemos ayudado a otros en el camino.
Les explico que en cada vida podemos vacilar, cometer errores, tomar caminos equivocados y tomar malas decisiones, pero con cada oportunidad y decisión crecemos.
La señal de una vida diferente es tener el coraje de seguir recogiéndonos después de contratiempos y terminar nuestras vidas con fuerza.
Principios Espirituales
- El alma no se puede definir o medir porque no tiene límites que se perciban acerca de su creación divina. Los informes más consistentes de la esencia del alma, es que representa la energía inteligente que es inmortal y se manifiesta por ondas vibratorias específicas de luz y color.
- Todos los seres humanos tienen un alma que permanece unida al cuerpo físico que han elegido, hasta la muerte. Las almas tienen acceso a la selección de su próximo cuerpo físico durante los ciclos de reencarnación. El alma típicamente se une a su cuerpo físico después de la concepción, entre el cuarto mes y el nacimiento.
- Cada alma tiene un carácter inmortal único. Cuando se une con un cerebro humano, este carácter del ego se combina con el temperamento emocional, o ego humano de ese cuerpo para producir una personalidad única, pero temporal para aquella vida. Esto es lo que se entiende por la dualidad de nuestra mente.
- Si bien la memoria del alma puede estar oculta al nivel de la conciencia a través de la amnesia, los patrones de pensamiento del alma influyen en el cerebro humano para inducir motivaciones para ciertas acciones.
- Las almas se reencarnan con los seres humanos durante incontables vidas para avanzar a través de los niveles de desarrollo al abordar tareas kármicas de vidas anteriores. Cada personalidad en cada vida contribuye a la evolución del alma. Las almas crecen en conocimiento y sabiduría a través de este proceso de aprendizaje mientras reflexionan sus pensamientos y acciones en vidas pasadas bajo la dirección de sus maestros espirituales entre vidas.
- Nuestro planeta es uno entre una cantidad incalculable de mundos que sirven como escuelas de entrenamiento para el avance de las almas. Durante las encarnaciones físicas temporales en la Tierra, las almas tienen la oportunidad de avanzar a través de la prueba y el error para acumular sabiduría. Los humanos no están obligados a una existencia predeterminada. Varias posibilidades y probabilidades que surgen de las influencias kármicas y contratos previos del alma, están sujetas al libre albedrío del alma.
- La Tierra es un lugar de gran belleza y alegría, pero también alberga ignorancia, odio y sufrimiento provocados por el hombre, combinados con desastres planetarios naturales sobre los cuales tenemos poco control. Hacer frente a estos elementos positivos y negativos en la Tierra es por diseño. Este planeta es un campo de pruebas para las almas, en lugar de ser un lugar de influencia demoníaca y malvada desde fuera de nuestro mundo. La malevolencia espiritual no existe dentro del orden divino de amor y compasión que comprende nuestros orígenes espirituales.
- La iluminación personal emana de cada uno de nosotros y otorga a los humanos la capacidad de alcanzar nuestro propio poder divino sin intermediarios.
- En el momento de la muerte física, el alma vuelve al mundo espiritual y la fuente de su creación. Dado que una parte de la energía de un alma nunca ha abandonado el mundo espiritual durante la encarnación, el alma que regresa se une con esa esencia de sí misma. Por lo tanto, el aprendizaje espiritual nunca cesa para el alma. El mundo espiritual también ofrece a las almas la oportunidad de descansar y reflexionar entre las vidas físicas.
- Las almas parecen ser miembros de agrupaciones de grupos específicos de espíritus que han sido asignados desde su creación. Los maestros de cada grupo son la guía espiritual personal de los miembros de ese grupo. Los compañeros espirituales que constituyen estos grupos se reencarnan con el alma y asumen papeles significativos en el drama de la vida del alma en la Tierra.
- En lugar de ser definido como un lugar de inacción suprema o nirvana, el mundo espiritual parece ser un espacio de transición para las almas que evolucionan hacia formas de energía superior, con capacidades para la creación de objetos animados e inanimados. La energía del alma misma ha sido creada por una fuente superior. El mundo espiritual tiene un área de influencia indefinida, excepto que parece incluir nuestro universo y las dimensiones cercanas.
- En el mundo espiritual al regresar las almas, no se ven deidades religiosas terrenales. La conexión más próxima de un alma a un poder divino es a través de su guía espiritual personal y los miembros de un consejo de consejeros benevolentes que supervisan los asuntos de cada alma. Las almas de la Tierra sienten y perciben la presencia de una Alma Suprema o Fuente divina que emana desde arriba de los seres sabios que forman consejos individuales.
- El mundo de los espíritus parece estar dirigido por especialistas en almas no reencarnados que están altamente avanzados y que regulan el trabajo de las almas a su cuidado. Cuando las almas encarnadas se desarrollen a niveles más altos de sabiduría y desempeño, dejarán de encarnar y tomarán su lugar entre estos especialistas, que ayudarán a las almas aún encarnadas.Aparentemente los especialistas en almas son seleccionados por su motivación, talento y eficacia.
- El objetivo final de todas las almas parece ser el deseo de buscar y encontrar la perfección, y finalmente unirse con la Fuente que las creó.
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